29 de desembre 2005

Els Hippy Boys, LIQUIDATOR i FANZINES

Interessant article extret del FANZINE de LIQUIDATOR de la Primavera del 2003

LOS HIPPY BOYS by Chiken
Los Hippy Boys tienen el honor de ser el grupo de Reggae más influyente y conocido (aunque no sea con este nombre) entre los amantes de este estilo tan variado y heterogéneo; dependiendo en cada caso de sus preferencias y gustos, son conocidos por ser el grupo de reggae más crudo, rápido y bailongo del Early Reggae (producciones de Bunny Lee), o como la segunda generación de Upsetters, combinando en esta faceta el ser los autores del ‘skinhead’ y ‘western reggae’ más puro y más de putcha mara´, o bien en su papel como pioneros y precursores del sonido roots; definitivamente su fama internacional les viene por ser la banda de Bob Marley & The Wailers en el lanzamiento mundial que les llegó de mano del magnate de Island, Chris Blackwell.

Principalmente nos interesan por su labor en los primeros años del Reggae, como músicos de sesión y grupo
nominal de intensos instrumentales, son conocidos y adorados por los amantes en general de esta época del reggae, música de sonido puro crudo y lleno de sentimiento que es el Primer Reggae, lo que por lógica incluye
a los Skinheads, al menos los que aun hoy son fieles al reggae.

De esta época en la que parieron algunos de los temas más electrizantes del momento se recuerda su labor
junto a algunos de los personajes que empezaban a despuntar a finales de los sesenta y que se harían con
los mandos de la música jamaicana en la década siguiente, Lee Perry, Harry J., Matador, Sonnia Pottinger o Bunny Lee, entre otros muchos, su elección en detrimento de otros la decidió su sonido, que era considerado en la época más primitivo y visceral que el resto, lo que le llevó a ser el contrapunto al combo líder de la época (Gladdy´s Allstars).

Sus orígenes como banda se remontan a 1968 cuando Hippy Boys era un jóven grupo que se dedicaba a tocar
para los turistas en clubes nocturnos y el circuito hotelero, principalmente el Hotel Flamingo de Kingston con
el joven cantante Max Romeo a la cabeza, y el cuarteto formado por, Glen “Capo” Adams al órgano , Alva ´Reggie´ Lewis con la guitarra, y el verdadero motor rítmico del grupo, los hermanos Carlton y Aston ´Family
Man´ Barret en la batería y el bajo, respectivamente... Max Romeo (décadas más tarde) nombra en este núcleo original a Webby Stewart que tocaría esporádicamente la guitarra.

Max Romeo que en ese momento era el más experimentado y profesional, les había ofrecido que le acompañaran (a él y su grupo, The Emotions) y se fueran a trabajar con ellos como su banda en los clubes y hoteles donde eran contratados regularmente.

Lloyd Charmers, que en aquel entonces pertenencia ocasionalmente a The Emotions, también habría estado en el grupo original, tocando ocasionalmente el órgano, el piano (que aprendió de Alton Ellis), y acompañando
lógicamente en el micro a Max Romeo. El punto a resaltar será la estrecha relación que mantendrá a partir de ahora Charmers con el grupo; a lo largo de estos años de formación del reggae produjo cantidad de temas de los Hippys, cantó (solo ó en los grupos a los que perteneció), tocó el piano y fue el autor de numerosas interjecciones vocales a lo largo de numerosos temas producidos por él mismo, el mayor exponente de estos seria la inimitable African Zulu.

Precisamente en el hotel Flamingo es donde según Romeo les bautizaron con el nombre de Hippy Boys, lo que sin duda debían parecer estos fumetas a ojos de los ricos y refinados turistas yankis y europeos. A finales de ese mismo 1968 dejaron el circuito hotelero, a petición del macarra de Bunny Lee, años más tarde Leroy Brown. Uno de los miembros de The Emotions, recuerda el suceso como un desdichado soborno (pasta y coches de por medio) por parte de Bunny (y su colega Lee Perry) que ofreció al grupo empezar a grabar enseguida. Para él tocaron como sus Allstars y la primera generación de Aggrovators, su primera grabación fue el éxito del momento, la versión de jazz Bangarang acompañando al experimentadísimo Lester Sterling. Posiblemente la razón para que Bunny Lee se fijase en ellos fue que había producido una serie de temas vocales a su teclista, Glenroy Adams, que ya era un conocido de los círculos profesionales de la música de Kingston, había sido uno de los miembros originales de los Pioneers en 1965 y participaba desde hace años como teclista y cantante en grabaciones de algunos de los productores que despuntaron con el rocksteady en 1966-67.
Bunny Striker Lee, vendedor de coches interesado en la música, había trabajado para Duke Reid como uno
de sus matones montándola en los sound systems de los rivales de éste y machacando a los Dj´s radiofónicos que no pinchaban los temas del Duke. Precisamente en el estudio de este, Treasure Isle, (elegido por el sonido que la construcción en madera de la isla del tesoro daba a las grabaciones) fue donde los Hippy Boys grabaron la sección rítmica del que seria su primer gran exito Wet Dream , su cantante Max Romeo grabó la parte vocal en Studio One, con Coxsone en la mesa de mezclas, éste curiosamente paró la grabación nada mas empezar gritando (literalmente) que no quería participar en la grabación de esa música de mierda y con un cantante idiota, por suerte, y por la influencia de Bunny Lee, el tema llegó a ver la luz y fue el comienzo de una fructífera relación con éste. De esta época quedaron temazos de la talla de She´s But a Little Girl en la que los Hippy Boys desatan toda su furia rítmica, en cuanto a su autoría personalmente este tema me levanta muchas dudas, los Hippy Boys... si, ¿pero Max Romeo? Creo que la voz suena demasiado bien para ser la nasal vocecita del romanticón de Max, si fue él le felicito por que sin duda sería la mejor interpretación de su discografía, esta apropiación de temas no sería ninguna rareza en la época, concretamente algunos de los temas que aparecen en sus primeros singles ingleses (Unity y Bullet) son temas de Pat Kelly o del Dj Charlie Ace.

A parte de grabar junto a mi amigo Max Romeo los Hippys trabajan este año y los dos siguientes con el resto de artistas que graban en el sello Bunny lee, esto es tanto como decir que su música acompaña a algunas de las mejores voces que ha dado la música jamaicana, estando presentes en los mejores temas que estos grabaron a lo largo de toda su carrera, Pat Kelly, Ken Parker, Derrick Morgan, John Holt o Slim Smith (sólo o con The Uniques grupo del que era miembro el pianista y cantante de los Hippys, Lloyd Charmers) con estos (The Uniques) llegaron a formar un verdadero equipo, siendo imposible disociar las sólidas melodías del grupo con los personalísimos ritmos que Hippy Boys les imprimían. Entre los músicos con los que colaboraron destacan Val Bennett, Roland Alphonso y Rico Rodríguez, que en esos años estaba considerado el heredero espiritual de Santo Don Drummond, esas voces y los años en los que nos movemos dan como fruto excepcionales piezas de rabioso y espeluznante reggae, que por aquel entonces conservaba su rabiosa originalidad.

Aparte de estos méritos, dos de los miembros del grupo, el prolífico Glen Adams y Alva ´Reggie´ Lewis formaban el exitoso grupo vocal The Reggae Boys bajo cuyo nombre editaron una serie de temas producidos en su mayoría por Joe Gibbs y en los que el grupo que había detrás del tema era al que pertenecían los cantantes, Hippy Boys, entre los que destaca la sensacional Reggae Train (... is co o o ommmin´...) con el inconfundible toque de vocecillas cantarinas muy resultón y pegadizo que creó un estilo infinitas veces imitado en el periodo 68-70.

Una de las razones (que no debería extrañar a nadie) del prestigio y el reconocimiento adquiridos por el sello ingles Pama entre los amantes más exigentes del reggae, fue el haber tenido la suerte y el acierto de distribuir los lanzamientos de este productor en la tierra que convertía al reggae en “pasta” (UK) y haber mantenido la dignidad de no adulterarlos con comerciales violines de blanquitos, esto es tanto como decir que vendían material de la máxima calidad entre una gran cantidad de mediocridad producida, lógicamente, por el consiguiente auge de cualquier estilo musical. (salvando una gran parte, y condenando otra no tan pequeña de lo editado por Trojan en estos años de felicidad, y es que, sobre todo a partir de 1970, sacaron mucha mierda los trojanos, con perdón de la expresión).

Aunque su emancipación del circuito hotelero fue efectiva tras su contrato con Bunny Lee, los primeros pasos comenzaron con los elogios y la colaboración del que más tarde sería su mánager, Bart San Fillipo que quedó fascinado al escucharles una noche en el hotel en 1968, tuvo que insistir ante su rechazo pero un año más tarde, después de aceptar grabar con Bunny, Max y los Hippys grabaron con él una serie de temas que no tuvieron gran repercusión, Sweet Chariot, Love y Michael fueron algunos de estos, después de esto los Hippys (por fortuna para ellos) separaron sus caminos de Max Romeo, que se fue a triunfar con San Filippo.

En ese mismo año, 1969, el grupo empezó a aumentar sus honorarios gracias a la creciente demanda de sus servicios. Seguían trabajando para Bunny Lee y el cuarteto pasa a ser la banda de Sonnia Pottinger con la
que grabaron para sus sellos Hi Note y Gay Feet, algunos de los éxitos más sonados en la época como Dr. No
Go, tema que sería más tarde usado por Max en un vocal. El nombre que a veces oculta su labor es el de los Gaysetters, a pesar de ello conservaron su nombre en gran cantidad de instrumentales, a los que se sumarían en numerosas ocasiones el sacrosanto Roland Alphonso y el pianista Aubrey Adams, que así mismo aportan sus melodías a una serie de temas producidos por Mrs. Pottinger, recuperados de la era rocksteady 66-68 y grabados por Lynn Taitt & the Jets, estos mismos también fueron renombrados con el nombre de Gaysetters.

Su relación junto a LLoyd Charmers como productor comenzó también en el año santo del reggae y dejó gran cantidad de instrumentales de ritmos machacones y disco tequeros de órgano planeador, sus grabaciones se centran principalmente en los años 69-70 en los que el músico-cantante produjo deliciosos Lp´s de la talla House In Session, Reggae Is Tight y Reggae Charm, uno de sus temas de mayor éxito era pinchado todas las tardes en la radio, a las cinco menos cinco resonaba en los transistores el hipnotizante 5 to 5 en cuya creación participo el genial Lee Perry con su acertado y original uso de la conjunción “a hit cha” que es ya un clásico en nuestras pistas de baile.

Otros productores que reclamaron sus servicios fueron Lloyd Matador Dalley, que a base de ritmos saltarines fusionó el fresco sonido de los Hippys con teclados de la talla de Neville Hinds o Boris Gardiner. O el primo de Leslie Kong, Herman ´Chin´ Loy, que experimentaba innovadores instrumentales con los Hippy Boys (que acabarían desembocando en el originalísimo “far east” de Augusto Pablo) En muchos de los temas, el teclado estuvo en manos del rastafara Augustus Pablo. Harry J. tampoco pudo resistirse y empezó a contratar al grupo de Glen Adams y los hermanos Barrett, en su caso, la confusión de adjudicaciones y la variedad de opiniones hace muy difícil sentenciar en qué momento y en qué temas nos encontramos con los Hippys, no sólo en determinadas canciones, si no en álbumes enteros, Gladdy´s Allstars o Hippy Boys se disputan la autoría (dependiendo de la fuente) de temas como Liquidator o Hang Em High. Al no encontrar ningún dato concreto la lógica lleva a pensar que al igual que el resto de productores que les contrataron en este periodo, Harry J. se fijase en ellos en 1969, cuando sus éxitos en los sellos de Bunny Lee empezaron a llamar la atención sobre esta joven banda, es entonces cuando el productor empezaría a sustituir paulatinamente a la banda líder del momento que llevaría usando desde sus primeras producciones en 1968 y que seguramente exigiría salarios más elevados. Es posible que en determinados momentos, los teclados o más miembros del grupo trabajasen en las dos bandas, Winston Wright y Glen Adams con seguridad. En cualquier caso el nombre con el que aparecían unos u otros en las galletas de los discos no varía, Harry J. Allstars ó Jay Boys.

Este año (69) que fue el más célebre de su primigenia época, también fue el del comienzo de su larga relación con el grupo de Bob Marley, Peter Tosh y Bunny Livingstone, los Wailers, tras haber sido producidos sin gran éxito por el americano Danny Simms y decidieron independizarse y crear su propio sello Wail ´n´Soul. En un principio usaban los servicios de la banda de Gladdy, Winston Wright, etc.. etc... (Crystalites, Dinamites etc... etc...) pero Bob se fijó en el jóven grupo de los hermanos Barrett, cuya sección rítmica le sorprendió gratamente en el primero de los temas (Watch This Sound) que tuvo el placer de escuchar. A partir de entonces, los Hippys, que eran admiradores (en especial “Familyman” Barrett) de uno de los grupos vocales más veteranos de la escena jamaicana del momento, pasaron a grabar con los Wailers en el estilo que poco a poco fueron definiendo su sonido, un reggae más funkorro, más negro y comprometido, Black Progress que es su primera grabación como banda de los Wailers, es una auténtica proclama de lo que buscaban expresar las conciencias agitadas de una gran mayoría de músicos de la época. El fichaje de los Wailers por Leslie Kong paralizó de momento el formidable y duradero equipo que formarían éstos y los Hippys.

El siguiente en caer en manos de los Hippy Boys fue el maestro Perry, Lee ´Scratch´ Perry, fue el productor que los empujó definitivamente a su máximo esplendor y auge profesional al haber favorecido (muy a su pesar como ya explicaremos más adelante) la excelente relación y el reencuentro entre los Hippys y el grupo preferido y mil veces elogiado de Scratch... The Wailers, que ahora eran parte de la escudería del sello Upsetter. El conjunto vocal recuperaba parte del prestigio perdido tras el estancamiento de popularidad entre los años 67-70 (aproximadamente), tras su discreto paso (en las listas de éxito) por el sello de Leslie Kong, Beverly´s, en el que dejaron algunas de sus piezas y versiones más exquisitas.

Su recuperación vino de la mano de un puñado de singles que los lanzó al éxito en la isla más rentable para el reggae (UK) Small Axe , My Cup , etc, etc... Aunque realmente este fue un éxito relativo (en relación a los números $), esta es considerada la época más pura y auténtica del trio. Centrándonos más en la banda, su fichaje por Lee Perry comenzó como un simple relevo de los saturadísimos de trabajo Gladdy´s Allstars para una gira inglesa, tras el triunfo en las listas del megatema Return of Django, (erróneamente adjudicado a los Hippys), Perry eligió al grupo que grababa con su buen amigo Bunny “Striker” Lee. Tras la gira quedó tan contento que jubiló a los primeros Upsetters y contrató a los Hippy Boys que pasaron a ser los nuevos Upsetters, estos crearon una nueva serie de instrumentales hammondianos y ritmos leeperrianos con los que jamaicanos e ingleses adictos a los Upsetters podían seguir flipando, su estreno con el indio no pudo comenzar mejor, el primer tema que grabaron fue Medical Operation, uuuuaaauuuuu!!!, y los bestiales Cold Sweat y The Vampire. Algo posteriores son los temas western que comienzan a crear dentro de una moda que se afianzara a partir de 1970, The Good the Bad & the Ugly, For a Few Dollars More, Taste of Killing, Return of the Ugly, Clint Eastwood , Eastwood Rides Again y Kill Them All, estos tres últimos ya dentro de la corriente de la que Lee Perry empezaba a empapar todas sus grabaciones, ritmos minimalistas e hipnotizantes de un tempo descaradamente más lento, experimentos de protodub e influencias del funk norteamericano más militante.

Es ahora cuando el sonido de los Hippys empieza a mutar y se ralentiza creando la base de la nueva corriente del reggae que va a dominar los 70´s, multitud de temas instrumentales de los Upsetters / Hippys en estos años, 1970-73, serán monótonos y minimalistas ritmos perfectos para experimentar en las mesas de mezclas y servir de base al estilo emergente de los parlanchines DJ´s.

Cuando en 1973 el lumbreras de Island, Chris Blackwell, se fijó en los Wailers y se los llevó al bote, los Hippys (exceptuando a su teclista Glen Adams) aprovecharon y se disolvieron dentro del nuevo concepto de grupo que Blackwell quería crear, de esta manera los Wailers / Hippy Boys pasaron a ser un grupo de rock a la manera de los exitosos mega grupos blancos como Rolling Stones o The Doors, el concepto fue bien aceptado por el mercado internacional y la saga de álbumes que el magnate Blackwell les produjo son ya parte de otra historia. El hecho de que Bob Marley y los Wailers arrastrasen con ellos a los Upsetters no le gustó nada a Lee Perry que los consideraba tan suyos como sus ideas, su música, y sus proyectos (como la tienda/casa Upsetter y su posterior
legendario-estudio Black Ark).

El hecho del descontento y las iras que levantaban los movimientos, las idas y venidas de los Hippy Boys son un claro reflejo de la calidad y el saber estar de estos geniales músicos que supieron estar en el momento y lugar adecuados... Sed fieles al reggae y escuchad el Medical Operation una vez por semana al menos.

Chicken